En el marco del Programa de Bienestar Socioemocional y Desarrollo Integral del Ministerio de Educación, la Universidad del Bío-Bío, a través de su Dirección de Docencia, participó en la ceremonia oficial de inicio del programa en la región del Biobío. La instancia, realizada en el Liceo José Hipólito Salas y Toro de Chiguayante, contó con la participación de autoridades regionales, representantes del Ministerio de Educación y de la Universidad del Bío-Bío.
La iniciativa busca apoyar el desarrollo integral de estudiantes de educación básica y media de los 49 establecimientos del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Andalién Sur, promoviendo el bienestar socioemocional, la participación y la resiliencia, mediante espacios educativos alternativos que respondan a las particularidades territoriales y culturales de cada comunidad escolar.
La actividad comenzó con las palabras de la coordinadora nacional del programa, Mónica Espina Farías, quien explicó que los talleres buscan desarrollar habilidades socioemocionales mediante el arte, el deporte, la cultura y la ciencia. Destacó que la iniciativa invita a las escuelas a repensar el proceso educativo, “donde las y los estudiantes no solo desarrollen una actividad artística, sino que también reconozcan su plano emocional y cómo eso lo pueden vincular con sus pares” señaló.
Por su parte, el seremi de Educación del Biobío, Carlos Benedetti Reiman, sostuvo que esta iniciativa representa un avance concreto en el fortalecimiento de la educación pública, al poner en el centro el bienestar, la salud mental y la convivencia escolar. Enfatizó, además, la importancia de mantener a las y los estudiantes como protagonistas del sistema educativo. “Así es como vamos mejorando la educación pública: fortaleciéndola con el trabajo de todos y todas, con una universidad con vocación regional, con el Ministerio de Educación a través de sus distintos servicios y dependencias, y con las niñas y niños de los servicios locales en el centro, lo que da sentido a esta gran política de Estado”, enfatizó.
La directora de docencia UBB y coordinadora institucional del programa, Grecia Avilés Gavilán, señaló que la Universidad del Bío-Bío ha asumido con convicción este desafío, acompañando a la Subsecretaría de Educación en la implementación de 448 talleres extraprogramáticos, en coherencia con los propósitos misionales de la casa de estudios de formar profesionales de excelencia, con compromiso social y capaces de dialogar y resolver dificultades.
Asimismo, destacó que cada actividad diseñada por la universidad, más allá de su componente académico, tiene un propósito formativo: contribuir a que niños, niñas y jóvenes desarrollen autonomía, responsabilidad y compromiso con su propio proceso educativo. “Nuestra meta es clara: construir un modelo que impacte positivamente en el uso del tiempo escolar, siempre con el objetivo de ofrecer oportunidades y experiencias que actúen como factores protectores del desarrollo personal y académico”, afirmó.
Por su lado, el director ejecutivo del SLEP Andalién Sur, Gonzalo Araneda Ruiz, valoró el programa como un complemento al proyecto educativo de cada institución, alineado con las preocupaciones permanentes de las comunidades respecto al bienestar socioemocional y la convivencia escolar. Agregó que, mediante talleres diseñados en función de los intereses del estudiantado, se busca generar experiencias significativas que los involucren activamente, les permita superar situaciones personales o colectivas y favorezcan su bienestar emocional, lo que a su vez impacta positivamente en un aprendizaje más efectivo, así como su participación en otras actividades académicas.
En marcha: talleres y aprendizajes con sentido
Durante la jornada se desarrollaron siete talleres de manera simultánea: Fotografía Digital para Comunicar, Arteterapia, Teatro, Danza Contemporánea, Producción y Realización Audiovisual, Básquetbol y Balonmano.
Cada taller cuenta con un plan metodológico estructurado y mecanismos de evaluación cualitativa y cuantitativa que permiten medir su impacto en el bienestar socioemocional del estudiantado. Entre las herramientas utilizadas se encuentra el Modelo CASEL (Collaborative for Academic, Social, and Emotional Learning), que identifica cinco competencias clave para el aprendizaje socioemocional: conciencia de sí mismo, autorregulación, conciencia social, habilidades relacionales y toma de decisiones responsables.
Para su implementación, el programa contempla el trabajo de más de 250 talleristas especializados, previamente capacitados por la Universidad del Bío-Bío, asegurando un perfil que responde a los objetivos del programa y, al mismo tiempo, tributando al sello UBB, el cual promueve una formación integral centrada en el compromiso, la diversidad y la excelencia.
La participación de las y los estudiantes reflejó el impacto positivo de estos espacios. “Me gustó mucho, ya que afuera de la sala encuentro que los cursos se conectan más y podemos hacer más actividades creativas”, expresó Martina Reyes, estudiante de 1° medio A. En tanto, Carla González, también de 1° medio A, valoró la instancia como una oportunidad para el trabajo en equipo: “Esto sirve demasiado porque salimos, nos comunicamos más, jugamos, trabajamos en equipo, y eso se aprecia mucho. Quizás en otras materias no se da tanto, ya que a veces, como en Matemática, no siempre se forman grupos. Pero cuando estamos afuera, nos unimos todos y hacemos cosas que realmente no sabía que se podían hacer”.
Proyección y compromiso institucional
Como parte de su diseño, el programa contempla la elaboración de recursos pedagógicos y metodológicos, la entrega de materiales a los establecimientos y el registro sistemático de la experiencia, con el fin de generar una propuesta sostenible y replicable en otras comunidades escolares.
En ese sentido, la coordinadora nacional del programa, Mónica Espina Farías, explicó que esta primera fase se implementa en cinco Servicios Locales a nivel nacional. “Nuestra expectativa es que el aprendizaje de este año nos permita construir un programa con mejores articulaciones para el próximo año, a partir de las propias necesidades que han levantado los territorios y las escuelas”, señaló.
Con esta iniciativa, la Universidad del Bío-Bío reafirma su compromiso en trabajar por una educación integral, donde el bienestar socioemocional no sea un complemento, sino el eje central del proceso formativo. Así lo expresó la directora de Docencia, Grecia Avilés Gavilán: “Solo cuando nuestros estudiantes se sienten valorados, comprendidos y motivados, pueden desplegar todo su potencial”.